domingo, 28 de septiembre de 2014

CUANDO LO QUE IMPORTA ES EL RESULTADO








El mundo del fútbol en los niños es como un medicamento. Hay que  saber cómo usarlo y en qué dosis.
Me explico. Siéntate a ver un partido con tus hijos pequeños. ¿Crees que sólo estas viendo deporte o pasando el rato?
Le estás transfiriendo visones de tu mundo a su pequeño mundo. Está aprendiendo.
¿Entonces? Si tu equipo gana y eso es lo importante, le enseñamos que el fin justifica los medios. No importa jugar sucio, pisar cabezas, pelear ruin, ser de moral laxa y de métodos poco transparentes. 
¿Ahora? Ahora no entenderá que le riñas por mentir, robar, portarse mal, mostrar grosería... Si con ello consigue lo que pretende. Es lo que ha visto en tu defensa del fútbol.

Pero el fútbol puede usarse para muchas cosas grandes en los niños. El sentimiento de pertenecía, el saber perder, el saber ganar, los modelos, la fidelidad, la actividad física, el celebrar, el respeto, la superación, el marcarse metas a corto plazo...

El fútbol no es sólo fútbol.

lunes, 23 de junio de 2014

UN EQUIPO DE PRIMERA Y UNA FALSA AFICIÓN





En el fútbol, como en la vida, cuando las cosas no salen bien lo primero que hacemos es buscar culpables. Culpables o responsables, según considere cada uno. Incluso están los que sólo buscamos la causa.

Es cierto que no toda la sociedad atiende al patrón de seguidor de fútbol pero es cierto que hay excepciones.Y existen ese tipo de partidos del que casi todos estamos pendientes, aunque sólo sea del resultado. 
Aprovecho para aclarar que no me consideró futbolera, en el uso extenso del término. Como espectáculos, deportivos o no, prefiero otros. 
Sin embargo, bien es cierto que la Unión Deportiva Las Palmas como representante de mi tierra queda fuera de esta explicación.
No desvelaré ningún secreto cuando digo que los partidos de fútbol cruciales paralizan y enfocan la atención del pueblo y quien más quien menos sabe de que ese día hay fútbol. 

Tengo una hija de cinco años que disfruta mucho de los espectáculos deportivos, de los partidos y nos acompañó a su padre y a mi este domingo.
Pero realmente qué es un partido: ¿El lugar donde llevar las frustraciones de una semana o una vida y descargarlas en forma de improperios y descalificaciones hacia todo lo que haga el rival y que no me beneficie? Opino que esa es parte de la población que se apoya en el fútbol para no centrase en su vida.
Pero el fútbol es mucho más: es identidad compartida , es fiesta y unión, es saber perder y saber ganar… El fútbol es un amante, aquello que impulsa, une, motiva, da aire...
Si algo no es el fútbol es lo que ocurrió este domingo en el estadio de Gran Canaria, ni lo que siguió ocurriendo en los medios y las redes sociales que exaltaban la violencia.
Eso es otra u otras cosas: baja autoestima, falta de empatía, ausencia de respeto, carencia de autocontrol y en definitiva, problemas serios con el amor propio y los valores.
De las fuerzas del orden y de seguridad se habla que no eran suficientes o adecuadas. Yo nunca había visto tan poca policía. La verdad que necesitemos de tener un centenar de policías armados hasta los dientes para no comportarnos como egoístas inconscientes sin autocontrol, refuerza la idea que tengo de que se quieren mejorar las cosas pero aún falta un largo camino que es el de la mejora de uno mismo ( y hablo en primera persona porque al fin y al cabo hablo de una parte de la sociedad. De la sociedad de la que formo parte aunque no me identifique).
Quiero pensar, de todas maneras, que algunos de los que saltaron al campo lo hicieron desde el amor enfurecido a su equipo y que se dejaron llevar por las pasiones y la conducta del que vieron saltar antes, sin pensar en las consecuencias de sus actos. Quizá sea ingenuidad el que piense así, como la que tenía mi hija de cinco años cuando veía como se llenaba de espontáneos las áreas cercanas al campo y nos decía que saltaban a ayudarles. Y si lo pienso ahora, así fue. Saltaron a ayudarles, pero no al equipo que allí estábamos apoyando sino al contrario. 
La vida cambia en un minuto, los actos que hagamos cambian el curso de las cosas y eso actos serán mejor para una sociedad si nacen del amor propio y el autocontrol.
Me pregunto, si esos espontáneos estarán pensando ahora toca ser consecuentes y hacer repaso, que no es cuestión de autoflagelarse, pero si hacer autocrítica, aceptar nuestros actos y su consecuencias. Por aquí levanta la mano una que aceptaría las disculpas, si eso conlleva que crezcamos como sociedad, donde vayamos aprendiendo que patrones violentos y egoístas no funcionan ni se aceptan.
Como leí en alguna publicación, la duda se siembra en si el partido se hubiese ganado, con sus consecuentes ascenso a primera y su fiesta, la sociedad habría entonces denunciado de manera tan insistente y tajante a los que causaron la paralización del partido. Es decir, si seguiríamos rechazando como una piña los actos independientemente de las consecuencias del mismo.
Es el momento de preguntarse que podemos aprender todos de lo ocurrido y qué podemos hacer para que algo así no vuelva a suceder.
 Y es que la vida es como el fútbol, siempre hay unos cuantos inconscientes que se empeñan en amargan la fiesta a muchos otros.



Ogarala´14

domingo, 27 de abril de 2014

LA HISTORIA QUE SE REPITE





     Este fin de semana, como otros muchos, es de partidos. De deporte, de equipo, de afición y en una de esas conversaciones que surgen, ante la derrota de tu equipo, salta la frase “es la historia de siempre”. 

Se encendió una luz.

¿Por qué crees tú que un equipo de fútbol, con mas de 60 años de historia, por donde han pasado centenares de jugadores, varios cuadros técnicos hasta por temporada, distintas directivas… siempre repite el mismo esquema de derrota?

Las expectativas, el aliento, la confianza. 

Todos pensamos en negativo, al mínimo error o a la mínima acción parecida a la que en el pasado han arrastrado hacia abajo al equipo, ya pensamos, decimos, gritamos, escribimos, sentimos que va a repetirse. Les pasa a los miembros de la afición, a la institución, a los jugadores. Pero no a todos, los ánimos y el optimismo también están presentes, pero la negatividad pesa tanto que hace eso, arrastra hacia abajo.
 Arrastra que una afición se levante en peso cuando su equipo va perdiendo a falta de unos minutos para el final, a pesar de que los futbolistas hayan jugado como leones; arrastra que dos días antes del encuentro un periodista pronostique en una radio regional que el equipo no va a ganar; arrastra que las expectativas sean de “no”.

Las personas tenemos una gran arma, la confianza. Alrededor de ella puede haber quienes la eleven o quienes la hundan. Esto pasa en el deporte pero también pasa en la relación padres-hijos, parejas, amigos, profesor-alumno, incluso uno consigo mismo.

¿Y ahora? ¿Y si ahora que sabes esto te planteas no poner expectativas negativas sobre nadie?¿Y si sólo pensamos que van a hacerlo lo mejor que puedan según las circunstancias? ¿Y si disfrutas simplemente con el hecho y el orgullo de intentar hacer las cosas?

Si queremos que las cosas cambien, podemos empezar por nosotros.

Ogarala´14

jueves, 24 de abril de 2014

HABLAR CON EL ESTÓMAGO





Hablar con el estómago es eso que no falla.

Cuando tengo alguna duda que no se resuelve fácilmente con un razonamiento o haciendo uso de las emociones, acudo a mi estómago.

Si quieres hacer una tortilla de papas sabrosa y fácil acudes a una receta, a la experiencia de quien la ha hecho muchas veces y te pones al lío. Si lo que quieres es decidirte entre dos colores para una nueva pulsera, comienzas pensando que te gustan los dos colores, cuál de ellos es mas combinable pero al final te tira el color que mejor te hace sentir.

¿Sigo con mi pareja o lo dejamos? ¿Inicio la búsqueda de tener un hijo o no? ¿Hablo con mi amigo de esas cosas que hace que tanto me disgustan o lo dejo estar? 

Hay algunas preguntas que tienes que hacérselas a tu estómago pues el diálogo con el corazón o la cabeza no dan una solución, mas bien nos ofrece un parche, un remiendo.

Si tienes alguna de esas dudas que dan vueltas y vueltas ¿qué tal si le preguntas a tu estómago?

Lanza una moneda al aire (cara, lo hago y cruz, no lo hago), justo cuando la moneda está en el aire ¿qué deseas con el estómago? y cuando la miras y ves el resultado ¿sientes alivio? ¿sientes que tienes ganas de dar la vuelta a la moneda?



                                                                                                                             Ogarala´14


lunes, 7 de abril de 2014

EL ESPEJO


¿Qué es lo que más amas? 
¿Qué es lo que más odias?

Hoy es lunes. Los lunes, para muchos, es el día menos bueno de la semana. Yo los lunes tengo zafarrancho: preparo y organizo el resto de la semana. Qué hay que hacer, cuándo, qué había programado... Es mi punto de partida, mi reinicio. Entre todo esto, pensé sobre qué escribir este post y entre varios temas elegí hablarles del conocimiento a uno mismo.

A menudo nos resulta sencillo hablar de otras personas y usar aquello de "le conozco y sé que lo va a hacer así" o, como solía decir mi madre "yo sé las cabras que guardo". Pero... ¿y nosotros? ¿Realmente gastamos tanto tiempo y energía en conocernos a nosotros mismos como a los demás?

Les contaré lo que yo he visto: en un ejercicio que hago a veces en mis sesiones, les pregunto a mis clientes por tres canciones: una que les desagrade, otra que les guste y otra que sea una bandera para ellos. ¿Y saben qué ocurre? Que muchos se quedan en blanco, algunos tienen claro recurrir a una canción que han escuchado últimamente en la radio y les ha removido, para señalarla como esa canción que les gusta. La canción bandera al final termina saliendo, pues todos tenemos la banda sonora de nuestra vida y no hay más que asociar la canción a un momento agradable que hayamos vivido y, aunque ni la melodía ni la letra sean algo exquisito, encontramos en ella una canción que nos eleva. Pero la canción que desagrada es la que más cuesta salir y, como en el caso anterior, muchas veces aparece por un criterio de asociación.
Después de ocurrirme unas cuantas veces, decidí pedirles que viniesen con las canciones pensadas ya a la sesión para poder avanzar con el ejercicio. 

¿Tú tienes claro cuáles son tus canciones?

¿Y cómo puedes llegar a conocerte más?

Cuando estamos conociendo  a alguien, una nueva amistad, compañero de trabajo o una pareja, muchas veces queriendo conocer al otro lo que hacemos es conocernos más a nosotros mismos. Sólo es cuestión de fijarse un poco. Al otro le gusta hacer una serie de cosas ¿te gusta hacerlas a ti?, el otro tiene unos valores que guían su conducta ¿compartes el fondo que hay en sus motivaciones?, esa persona tiene una manera de hablar cuando se dirige a los demás ¿sientes que te gusta que te hable así a ti? 
A veces, nos puede sorprender las cosas que tenemos en común con alguien que creemos tiene una filosofía de vida distinta a la nuestra y lo poco que tenemos en común con personas que nos rodean a diario.

Feliz semana y un millón de besos.

jueves, 3 de abril de 2014

PERSONAS MEDICINA


 ¿Qué aspectos aportan salud a sus vidas? 


    Ahora tu mente se ha disparado a pensar: comida sana, ejercicio y hasta control del pensamiento, eso de no estresarse.

¿Y las personas que están en ella? O las que pasan por ella.

A lo largo de un día normal me encuentro con varias personas tóxicas y también, por suerte, con varias persona medicina.

Les contaré lo que me ocurrió hace unos días en la caja de un supermercado:

  Estando con mi compra sobre la cinta de caja, tenia a tres clientes por delante. Los primeros eran una pareja joven que apenas llevaba diez o doce artículos y tras ellos, un señor de unos cincuenta años que sólo llevaba en los brazos un pequeño electrodoméstico. Con mirarlo con algo de atención te dabas cuenta que no estaba habituado a ir a un supermercado, al menos sólo.

Después de pasar la compra de la pareja, la mía empezó a avanzar en la cinta. El cajero fue a empezar a pasar artículos y le dije que no, que el señor estaba antes. Aquel hombre se mostró muy agradecido, ese tipo de agradecimiento que sentimos cuando alguien nos dice amablemente cómo funciona alguna cosa o cuál es el procedimiento a seguir. Algo que para el resto de clientes y para el cajero era algo habitual para él fue algo extraordinario. 

Se le intuía tímido y despistado, con cierto nivel de angustia. En el momento que pasó a la caja se relajó, habló amablemente, bromeaba y sonreía. 
Justo después, cuando salía con mi compra pasaba con su coche y volvió a dar las gracias y saludar amablemente.


Este pequeño hecho es una de esas pequeñas historias que van haciendo grande un día. Adoro a las personas agradecidas y humildes, hacen que mis días crezcan y dan medicina a mi corazón.

¿Qué personas medicina has tenido últimamente en tu vida?


Espero que muchas y que te enfoques en ellas.


Hasta la próxima pequeña historia...

          Llegó abril... Después de retomar mi pasión por la escritura me planteo, durante mucho tiempo, cuál debe ser el objetivo y el contenido de este blog nuestro.  Inmersa en la psicopedagogía positiva, el coaching y el desarrollo personal, que además de mi profesión es mi motor, entendí que el blog debía estar vinculado a ello. Sin embargo, más que como un espacio que de pautas y reflexiones profesionales, la lectura de este blog va a llevarte de viaje por todas esas pequeñas historias que nos ocurren a diario con una mirada optimista pero crítica, analítica pero positiva y es que todos y cada uno de los días son grandes por esas pequeñas historias.

Mi mayor deseo ahora es, que disfrutes con su lectura como yo disfruto con su escritura.


Gracias.